Así lo afirmó el Intendente Martín Perez en el marco de la presentación del libro de la ciudad: “Cien años de Río Grande. El pueblo de las flores amarillas”. Se trata de una producción de los historiadores Oscar «Mingo» Gutiérrez, Esteban Rodríguez, y Federico Rodríguez, en el marco del Centenario de la Ciudad. La presentación fue en la Casa de la Cultura, junto a antiguos pobladores, invitados especiales y trabajadores de prensa.
Este viernes en la Casa de la Cultura, el Intendente de la Ciudad, acompañado por antiguos pobladores, funcionarios municipales, concejales y medios de comunicación, llevó adelante la presentación del libro de la ciudad: “Cien años de Río Grande. El pueblo de las flores amarillas”, producción de los historiadores Oscar “Mingo” Gutiérrez, Esteban Rodríguez y Federico Rodríguez.
Cabe destacar que se trata de un libro que recopila historias y anécdotas de nuestra ciudad, buscando con ello plasmar las características y particularidades que hacen a nuestra identidad como riograndenses. Invita a conocer personas, instituciones y eventos relacionados con el pasado y el presente de Río Grande.
Al respecto, el Intendente Martín Perez destacó que «este libro es una recopilación de datos, relatos e historias de nuestros antiguos pobladores, pioneros y pueblos originarios que mantienen viva la cultura de nuestra ciudad».
En este sentido, expresó que «en estos textos me encontré a mí mismo como hijo de esta de esta tierra».
«‘Cien Años de Río Grande. El Pueblo de Flores’ Amarillas contiene luchas y el esfuerzo de las personas que hicieron grande a esta ciudad; hay anécdotas familiares y personales, y el esfuerzo y sacrificio son dos valores que transitan por todo el libro», manifestó Perez, quien reconoció el esfuerzo y sacrificio de «los ex combatientes de Malvinas, a nuestra Vigilia, a los trabajadores petroleros e industriales. Este libro somos nosotros».