Martín Perez afirmó que «nuestra proyección es poder habilitar toda la avenida y la rotonda antes de que termine este año». Se trata de una obra que va a cambiarle la cara a nuestra Río Grande, la cual ya se puede apreciar a partir de la apertura de la primera mitad de la nueva rotonda.
En el marco del plan de obras más importante de los últimos años que lleva adelante el Municipio de Río Grande, sigue avanzando la construcción de la doble vía de la Av. Santa Fe y la ampliación de la Rotonda de las Américas, obra que mejorará y optimizará la transitabilidad de vehículos en un punto central de la ciudad.
En ese marco, el intendente Martín Perez, junto a la secretaria de Planificación, Inversión y Servicios Públicos del Municipio, Silvina Mónaco, recorrió la obra que se lleva adelante a buen ritmo con importantes avances en cuanto al hormigonado de las arterias.
A su vez, agregó que «la mitad de la avenida Santa Fe nueva está terminada, pero después del invierno, nos enfocaremos en la segunda etapa que va a ser más sencilla y no va a generar complicaciones en el tránsito».
El Intendente de la ciudad determinó que se trata de «una obra que a fines de este 2022 la vamos a tener finalizada y los vecinos la van a poder disfrutar». En esa línea, afirmó que «va a ser una obra que va a cambiar la cara de nuestra ciudad por completo».
Finalmente, Perez en la recorrida por la obra observó el gran avance de la nueva rotonda de las Américas: «Estamos haciendo todo el esfuerzo posible para avanzar antes de la veda invernal». Además, destacó que «nuestra proyección es poder habilitar toda la avenida y la rotonda antes de que termine este año».
Por su parte, Mónaco detalló que «se estuvo realizando el hormigonado en el acceso suroeste a la mitad de la rotonda que está en ejecución. También se trabajó en el trazado del sector ante las dimensiones de la nueva rotonda».
Finalmente, indicó que «en los próximos días se avanzará en la corona de la segunda etapa de la rotonda», para ello, comentó que «se trabajó con interferencias, se pusieron cámaras, sumideros, se dejaron previstos cañeros, se trabajó en el suelo, se lo compactó, se armó la traza y después se continuó con el llenado para, finalmente, tener el sector que se abrió de la rotonda con el faltante de la corona».