Ushuaia.- El Parlamento fueguino sancionó el proyecto de ley presentado por la legisladora Cristina Boyadjian (MPF) y acompañado por sus pares, que declara a las bibliotecas populares de la provincia como “bienes de utilidad social”. “Las bibliotecas populares son reservorios de conocimiento e idiosincrasia cultural, aspectos que desde el MPF buscamos fomentar”, dijo la Legisladora.
La iniciativa contó con el voto unánime de los Legisladores provinciales, y previamente había contado con el dictamen favorable de la Comisión 4 de Educación.
“Con esta Ley, se garantiza la inembargabilidad e inejecutabilidad del patrimonio bibliográfico y de los inmuebles sedes de las bibliotecas populares de nuestra provincia, garantizando así el fin social que brindan y preservando la cultura”, afirmó la legisladora Boyadjian.
Las bibliotecas populares son asociaciones civiles autónomas, sin fines de lucro, creadas por la iniciativa de los vecinos de una comunidad, las cuales a partir de la promoción y difusión del material bibliográfico y multimedia coleccionado, brindan acceso a la información, a la educación, recreación y animación socio-cultural a la comunidad. Asimismo, fomentan la lectura, promueven tanto la participación activa como la inserción social, y son sede de encuentros sociales y culturales.
Este proyecto de ley del MPF va en consonancia con la Ley nacional Nº 23.351, que fomenta y promueve el desarrollo de las bibliotecas populares, y determina las bases para su funcionamiento y desarrollo, y dispone diversas medidas de protección e incentivo. Acompañadas por el trabajo que realiza la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP), estas bibliotecas populares han podido desarrollarse y expandirse en todas las comunidades del país, acercando los vecinos a la cultura.
En nuestra Provincia las bibliotecas populares son reconocidas por su interés público y trascendencia social mediante la Ley provincial Nº 643, que dispone diversas medidas de promoción e incentivo, a partir del trabajo comunitario de quienes desinteresadamente colaboran en el desarrollo y promoción de la cultura y la idiosincrasia local y regional. En la actualidad, son 9 las bibliotecas populares reconocidas por la CONABIP en Tierra del Fuego.
Boyadjian añadió que “las bibliotecas populares son reservorios de conocimiento e idiosincrasia cultural, aspectos que desde el MPF buscamos fomentar, y es por ello que por medio de este proyecto de ley que acaba de sancionarse, se busca que el patrimonio bibliográfico y los inmuebles sedes de las bibliotecas populares de nuestra provincia no puedan embargarse ni ejecutarse”, cerró