En medio de la pandemia de coronavirus, el Ministro de Desarrollo Social admitió que el Gobierno “volvió a poner el eje en la política alimentaria”.
BUENOS AIRES (NA).- El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, reconoció que la situación social y económica es “crítica” en todo el país y explicó que “la pobreza sube porque sube el precio de los alimentos”.
“La situación es muy crítica y la pobreza sube porque sube el precio de los alimentos. En Argentina si sube el precio de los alimentos, sube la pobreza, claramente”, resaltó.
“No es la situación del 2001 cuando teníamos 28% de desocupación y 57% de pobreza” aclaró, al diferenciar la situación de dos décadas atrás respecto del presente que registra un nivel de pobreza del 45,3% de acuerdo a la última medición del INDEC.
A raíz de este cuadro de situación que se da en medio de la pandemia de coronavirus, Arroyo admitió que el Gobierno “volvió a poner el eje en la política alimentaria”.
“Tenemos 10 millones de personas que reciben asistencia alimentaria. Hace 3 meses que esa situación no cambia”, indicó.
Arroyo señaló que “en el último tiempo ha habido más changas” aunque lamentó que eso no derivó en una reducción de la cantidad de personas que reciben asistencia alimentaria en comedores.
“Tiene que ver básicamente con el problema de los precios de los alimentos”, explicó.
Consultado sobre las políticas para dar respuesta al acceso a los alimentos, el Ministro destacó la extensión de la tarjeta Alimentar para menores de hasta 14 años.
Sobre las críticas que recibió del líder de la UTEP, Juan Grabois, respecto al costo de financiamiento que imponen los bancos al programa Alimentar, Arroyo explicó que eso se relaciona a que el programa funciona principalmente con el sistema de lector de posnet.
“La tarjeta es de bancos públicos que se usa con posnet. Eso claramente marca una limitación que tiene que ver con el funcionamiento de la economía”, dijo.
“Estamos desarrollando un esquema en el cual con una aplicación se pueda vender de forma directa sin posnet”, subrayó, lo cual evitaría el costo de financiación.